miércoles, 18 de agosto de 2010
Minera San Josè
En relación a las causas políticas que se están produciendo con el accidente de la mina San José, ya esta claro que existe una débil fiscalización por parte del estado chileno sobre los aspectos de seguridad y medio ambientales que produce la actividad minera. Y una de las causas que yo veo que produce esta negligencia, es que el estado es a su vez propietario o accionista de empresas mineras, es regulador de las políticas del sector minero, es fiscalizador para el cumplimiento de las normas ambientales y a la vez promotor de las inversiones mineras.
También, el estado, decide sobre tierras, agua, y las políticas mineras. No existe ninguna institución que vigile las actividades del estado y que proteja los derechos e intereses de Chile. Ya que esta claro que el Parlamento solo actúa una vez que el problema sucedió, los sindicatos mineros son débiles, o están concentrados en más reivindicaciones salariales que en ser parte activa en la búsqueda del respeto a la vida humana y a la labor minera.
En cuanto al impacto de la minería, se debe tomar en cuenta ciertas recomendaciones. Entre ellas, está la misión de todos los actores de fiscalizar de manera adecuada las operaciones mineras, suspender aquellas que no cumplan con la ley, asimismo multarlas y hasta clausurarlas, con ello se evitará la propagación de empresas mineras informales.
Si es que no se hace nada con respecto a este problema, la pequeña y mediana minería chilena desaparecerá, y nos perjudicaría, ya que esta es la principal generadora de empleos en las regiones del norte grande
.
En síntesis, el problema y las consecuencias que acarrea la minería en Chile es producto tanto del Estado, como de las empresas privadas y las organizaciones de los trabajadores, por ello, se deben aplicar las leyes que antes no han sido tomadas en cuenta.
Por ultimo se debe ejercer un mayor apoyo social a los habitantes de las regiones mineras, además de brindarles una adecuada información sobre los costos y beneficios de la minería para sus regiones y el país.
La minería es provechosa para el país y, por ende, se le debe apoyar, y no perjudicarla colocando mayores obstáculos; sin embargo, según mi opinión, no se debe olvidar el gran impacto socio ambiental que producen las empresas mineras y estas requieren de una súper intendencia que vigile su actuación.
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